Toldos, velas, pérgolas y sombrillas serán tus mejores aliados en el jardín

Prolonga un poquito más esos momentos relax en el exterior con la sombra adecuada.

Toldo tipo vela en el jardín
Hearst

Disfruta a tope tu jardín, porche o terraza con la sombra adecuada. No te costará mucho descubrir qué tipo de protección le va mejor a tu rincón relax: Toldos tipo vela, toldos tradicionales, sombrillas... Porque esos momentos al fresco no tienen precio.

Porche con toldos de esparto
Hearst
1 de 12
Vistas al campo

Según la orientación del porche es posible que el ambiente necesite una sombra adicional al llegar la tarde para protegernos del sol. La elección puede variar desde un toldo fijo, unas cortinas de loneta o, como en esta casa de campo, unas persianas de esparto, típicas del sur de España y que, además, resguardan del calor.

Se pueden encargar a medida en Espartería Juan Sánchez (www.esparteria.com).

Sombrilla lateral de Ikea
Hearst
2 de 12
Junto a la pared

Incluso en los balconcitos o terrazas más reducidas es posible conseguir una zona de sombra, sin agobiar el espacio, con sombrillas laterales como el modelo Flisö, de venta en Ikea.

Al tener ubicada la barra en un extremo, permite adosarla a la pared despejando así el ambiente (20 €).

Porche con techo de planchas de brezo
Hearst
3 de 12
Sol y sombra

Las estructuras fijas conviene cubrirlas con materiales que procuren semisombra, para así disponer de una zona refrescante en verano y dejar que filtre algo de sol y calor para los días más fríos del otoño.

Los productos naturales, como las planchas de brezo, son estupendos además de asequibles y muy fáciles de instalar.

Porche con persianas de cañizo
Hearst
4 de 12
Presencia vegetal

Jardines algo más silvestres o espacios desenfadados junto a la piscina agradecerán un tipo de sombra que incluya plantas y flores en abundancia; aquí la combinación de persianas de cañizo y una amplia variedad de arbolitos, cactus y arbustos con flor proporciona un ambiente muy refrescante. Mesas y sillas, de Gandia Blasco.

El bambú

¿Por qué elegir cañizo de bambú? Al tratarse de una variedad tropical, soporta altas temperaturas sin dañarse en absoluto y, lo más importante, no le afecta la humedad ni la lluvia. Como techado es idóneo por su ligereza y escaso mantenimiento.

Cenador: pérgola con toldo y celosía lateral
Hearst
5 de 12
Un salón muy fresquito

¿Por qué no crear una zona de estar en medio del jardín? Si cuentas con árboles, su sombra bastará para protegerte del sol y si no, una pérgola con toldo y celosía lateral será perfecta, además, para garantizar cierta intimidad. El modelo Classique, es de la firma Unopiú (desde 350 € aprox).

Porche con plantas y comedor exterior
Hearst
6 de 12
Ideas fijas

Sin duda un porche entorno a la casa garantiza una sombra fantástica durante casi todo el día; además, ayuda a refrescar el interior de la vivienda en las épocas de más calor, ya que
evita el sol directo en la fachada.

Emparrados vegetales
Hearst
7 de 12
Bajo techo

Los tradicionales emparrados vegetales continúan entre los favoritos del verano como propuesta de sombra para una zona de comedor en el jardín.

El espacio perfecto donde llevarlo a cabo sería entre dos muros que permitan colocar una estructura sobre la que entrelazar las plantas. Sillas (180 € c/u) y mesas (desde 380 € c/u) modelo Conrad, de Unopiú.

Toldo tipo vela en el jardín
Hearst
8 de 12
Toldo tipo vela

Improvisar una sombra es fácil, incluso, en pleno campo. La clave está en contar con un par de árboles que hagan las veces de soporte y colgar de sus ramas una tela amplia que proyecte buena sombra. Si vamos de picnic, quizá el propio mantel o una toalla sean susceptibles de actuar como toldo, al menos, para ese día.

Todo trapo

Emulando las velas de los barcos, incluso para dar un nuevo uso a las auténticas, están de moda los toldos triangulares denominados "velas de sombra". Se trata de un diseño sencillo y llamativo, fácil de adaptar a todos los estilos con tan solo variar el tipo de tela elegida.

Mira cómo hacer este toldo en este tutorial.

Pérgola de cañizo
Hearst
9 de 12
Un anexo especial

Algunas casas de pueblo no cuentan con porche ni sombra de ningún tipo para disfrutar del jardín en las calurosas jornadas de verano. En estos casos adosar a una de las paredes una pérgola diseñada para este fin es todo un acierto. En la foto, modelo Solaire, de Unopiú, con estructura metálica y techado de cañizo. Incluye un par de jardineras (desde 950 €).

Columpio en el jardín
Hearst
10 de 12
En suspensión

Déjate adormecer con el vaivén de una hamaca columpio a la sombra de un árbol centenario; se convertirá en tu rincón de verano favorito para disfrutar de un buen libro o de una merecida siesta.

Porche con muebles de fibra
Hearst
11 de 12
Materiales naturales

Cada elemento presente en el porche influye en la calidad de la sombra conseguida; el suelo de losetas de barro, las paredes blancas o el ventilador, por ejemplo, reforzarán la sensación de frescor. También los muebles de fibra son una buena apuesta, no dan calor y combinan con todos los materiales.

Comedor en el porche
Hearst
12 de 12
Máxima intimidad

En parcelas de grandes dimensiones, con generosas extensiones de prado, retomar la antigua tradición del cenador independiente es muy buena idea. Ganaremos una zona de estar o un comedor a la sombra, con posibilidad de equiparlo y decorarlo al completo sin temer a la lluvia. Silla Riviera (309 €), cojín (29 €) y capazo (16 €); de Affari.

Plus deco

La independencia que aporta un cenador separado de la casa se puede reforzar equipándolo con visillos vaporosos que, además, protegerán del sol al caer la tarde y de los molestos mosquitos por la noche. Si te gusta la idea, no olvides contar con un sistema para recogerlos.

Publicidad - Sigue leyendo debajo