Una bonita solución que viene directa desde Japón, son las kokedamas. Su propio nombre las describe: koke (musgo) + dama (bola). Plantas naturales sin maceta que dejan sus raíces al aire en una bola de sustrato compacta y que, además, son ideales para colgar de los techos. Y no sólo en el exterior (balcones o terrazas), sino que las kokedamas son perfectas para decorar el interior de casa. Son fáciles de mantener pero eso sí, debes tener en cuenta una serie de condiciones como que debes colgarlas en un lugar libre de corrientes y elegir plantas decorativas que sean fáciles de mantener, veras que decoran de forma original tu hogar. Sigue este paso a paso para hacerte una kokedama.
Materiales que necesitas:
- Una plata de poco desarrollo, a tu elección
- Turba
- Arcilla
- Musgo
- Hilo o cuerda
- Sustrato especial para bonsáis (akedama)
Cómo hacer una kokedama colgante paso a paso:
- Haz una bola de sustrato. Para ello, mezcla turba y sustrato especial para bonsáis (akadama) en una bola compacta. Puedes añadir arena de río si lo deseas. Lo ideal es que mezcles tres partes de turba y una de akadama.
- Planta la especie. Abre un hueco en la bola y coloca las raíces de tu planta, bien centradas.
- Refuerza. Para reforzarla, rodea la bola con cuerda de tu elección (mejor tipo yute) y ve haciendo nudes alrededor. Con esto lo harás más estable.
- Coloca el musgo. Para mantener la humedad de la kokedama se hace imprescindible el musgo. Corta pequeños trozos y colócalos alrededor, sujetos de forma disimulada con la cuerda.
Cuidados para que tu kokedama se mantenga saludable: no la expongas de forma directa al sol y evita las corrientes de aire.
Para regar la kokedama bastará con ir pulverizando regularmente para que es sustrato y el musgo se mantenga húmedo e introducirla en agua de vez en cuando veas el musgo demasiado seco.