Tras la intensa temporada estival, seguro que tus muebles de exterior han sufrido lo suyo y quieres darles una mano de pintura o barniz antes de que llegue el frío. Pero no cometas un error muy común: Pintar los muebles al sol.
En dos palabras: Debes evitarlo.
El verano es una buena época para pintar al aire libre, pero ten cuidado y elige la hora correcta para hacerlo.
El sol puede acelerar el secado de la pintura, pero algunas contienen componentes que reaccionan al sol directo, provocando la aparición de burbujas o agrietándose. Además, al secarse tan rápido te impedirá hacer retoques cuando la pintura aún esté húmeda.
Pinta a primera o última hora del día, ya que las temperaturas son suaves.