La importancia de las texturas
"El hygge es una experiencia sensorial. Nos reconcilia con el mundo conectando nuestras emociones y nuestros sentidos", explica Louisa., que recomienda usar materiales naturales, cálidos y acogedores, como la madera ("una sustancia viva que nos invita a tocarla"), la lana, el algodón o el lino. En la imagen, una propuesta de Affari.