Lámparas de techo
Lo que sucede en la mesa tiene máxima prioridad: las lámparas de techo son las protagonistas, y su misión es garantizar la adecuada iluminación de platos y fuentes. Si la mesa es redonda o cuadrada, bastará con un único modelo centrado sobre ella. Pero si es rectangular, será necesaria una pareja para evitar que los comensales de los extremos queden en sombra. Las lámparas suspendidas descienden y se acercan al mantel, aunque sin traspasar el límite que marca la altura de los ojos. A la hora del café, se apagan y llega el turno de apliques y lámparas de pie o mesa, que invitan al relax y a la tertulia. Lámparas, de Ikea.