Si están todas las paredes de la habitación pintadas en verde manzana, opta por tapicerías lisas para los diferentes elementos que nos comentas. Puedes poner unos estores en blanco roto, que destacan de la pared y combinan bien con el tono oscuro del mobiliario, con unas caídas a los lados —incluso paneles japoneses o cortinas de flecos, que darán un aspecto muy actual— que combinen marrón chocolate con alguna pincelada de verde, a ser posible en telas irisadas, que darán luminosidad. Para la cama elige una colcha, edredón o funda nórdica en color tierra con cojines en marrón oscuro y blanco roto. Como apoyan sobre una pared verde, no introduzcas más notas de este color. Combina algunos cojines lisos con otros estampados y de telas de diferentes texturas —ante, piel, raso, telas metalizadas y con brillos o, incluso, con plumas—. Para la butaca, opta por una tela neutra o piel blanca.