Desde luego la combinación del púrpura y el gris es muy atractiva y elegante, pero corres el riesgo de oscurecer el ambiente. Dado que tu salón es amplio y con mucha luz, aprovéchala introduciendo algunos elementos en blanco, como alfombras, mesas y complementos. Incluso te recomiendo que los tonos grises de las paredes los escojas en su gama más clara, para que se refleje la luz; si los eliges demasiado oscuros, el resultado puede ser poco atractivo.