¿Eres de las que decoras tu casa de Navidad el 22 de diciembre mientras escuchas la lotería o prefieres anticiparte y en el primer festivo de mes ya estás sacando las cajas del trastero?
Seas del grupo que seas, seguro que sientes un poquito de emoción cada vez que recuperas los adornos navideños. La corona para la puerta de la calle, el muérdago colgado en el umbral y todos esos pequeños detalles que vas colocando en tiradores, mesas auxiliares, sillas, paredes…
¡La Navidad lo cambia todo! Y si no, fíjate en cómo hemos transformado el aspecto de este salón. Apenas sustituyas los textiles por tonos más navideños, reserves un sitio privilegiado para el árbol de Navidad, coloques unas velas y conviertas la flor de Pascua en tu nuevo centro de mesa, tu salón ya parecerá otro. Más cálido, más acogedor y, como cada año, a la espera de reunir a los amigos que no pueden faltar y a familiares que vienen de lejos, para recordar lo felices que sois cuanto estáis juntos.
El salón: Antes y después
Antes...
El salón aún no tenía ningún espíritu navideño. Pero contaba con puntos a su favor: el sofá blanco, sobre el que quedarían ideales cojines de cualquier tono; una mesa auxiliar, fácil de desplazar a otro lugar para ceder su sitio al árbol; y una mesa de comedor amplia, que sería perfecta vestida con un mantel largo.
Después...
Definitivamente, el lugar del árbol es el salón, donde pasamos más tiempo con los nuestros. Sitúalo cerca de la ventana —con las luces encendidas, se verá desde la calle—, próximo a la chimenea (si tienes) o a la mesa de comedor, como aquí. En el sofá, sustituye las fundas de los cojines por otras con motivos y colores navideños: renos, estrellas… en rojo, blanco glaçe o dorados.
¡Ohhh, blanca Navidad!
¿Quieres pinear un ambiente nórdico en Pinterest?
Coloca una alfombra y deposita en ella velas y adornos de este color. ¡Parecerá que ha nevado en el salón y todos querrán guardarlo en sus tableros! Ubícala sin que entorpezca el paso.
Decora la mesa de centro y las auxiliares con adornos pequeños.
Acertarás con detalles de cristal, madera o dorados. Colócalos directamente en el sobre o reunidos en una bandeja.
¿Y qué tal si pones otro árbol mini para los peques?
En la mesa o en el suelo, como en este salón. Al margen de su tamaño, busca el equilibrio en los adornos. Si decoras sus ramas con bolas plateadas, altérnalas con detalles en madera que le aporten calidez.
Cuando piensas en Navidad, ¿qué colores te vienen a la mente? Blanco, verde, rojo… ¡Inclúyelos en tu salón!
El verde es fácil, ya solo con el árbol lo tienes cubierto. Para el rojo opta por una o varias flores de Pascua que decoren la mesa de comedor y unas ramitas de bayas rojas. En cuanto al blanco, puedes jugar con adornos, macetas o el propio mantel.
Recrea el estilo de este salón con estas piezas:
Realización: Pilar Perea.
Ayudante de realización: Paula Balboa.