Goza de impresionantes vistas: desde esta casa de Zaragoza se puede ver la Basílica del Pilar. El emplazamiento no puede ser mejor, sin embargo, se trataba de un inmueble muy antiguo que fue preciso actualizar con buenas instalaciones y nuevos acabados. La interiorista Noelia Villalba, de interioristazaragoza.es, es la responsable de la reforma y la decoración.
Mejora de aislamientos. El grueso de la obra se centró en reforzarlos e instalar un sistema de calefacción y una caldera de bajo consumo.
¡Fuera paredes! También se demolieron tabiques para hacer un gran espacio compartido que incluye entrada, comedor, cocina y estar. La zona privada se compone de baño y dos habitaciones: el dormitorio principal, equipado con un armario empotrado, y además un segundo dormitorio convertido en despacho, de menor tamaño comunicado con el primero.
Caja de luz. Lo importante era que la luz se reflejara y la sensación de amplitud fuera mayor, por eso se ha utilizado el color blanco en paramentos y puertas, lacadas del mismo color. Además, el suelo en lamas anchas, de Haro, unifica los ambientes y conecta con los acabados.