Cantidades, ingredientes, tiempos de reposo, horneado… son los aspectos que más preocupan a la hora de preparar pan en casa.
Dentro de la corriente bio se ha puesto de moda preparar nuestro propio pan, pero no todos somos expertos. ¿Qué os parece perder el miedo de la mano de Ibán Yarza? Para los que no le conzcáis, Ibán es un divulgador del pan casero, periodista y viajero incansable y de su mano nos lanzamos con esta receta: pan sencillo sin amasado (solo tiene que reposar, el reposo, amasa).
Será el primer paso y después no habrá receta que se resista. Es cuestión de práctica. En el libro Pan casero, de Larousse, encontraréis muuchas más propuestas de este panero moderno.
Receta pan sencillo sin amasado - © Ibán Yarza
Ingredientes:
- 450 gr de harina panificable
- 25 gr de harina integral
- 330 gr de agua (66%)
- 10 gr de sal
- 5 gr de levadura fresca (o 1,5 gr de levadura seca)
- 150 gr de mezcla de semillas (girasol, lino, sésamo, calabaza…)
Preparación:
En esta receta, el tiempo hace su labor, pero para que la técnica funcione es necesario que la masa tenga una buena cantidad de agua. Así que no tengas miedo de incorporar más agua de la que indica la receta.
Tras un día en la nevera, el gluten de la masa se va formando solo.
1. Disolver la levadura en agua tibia (a unos 25ºC). Mezclar todos los ingredientes enérgicamente con una mano. Con la otra mano limpia, ir girando el bol. La masa quedará pegajosa. Si no lo está, añadir más agua. Dejar que repose en el bol 5 minutos y luego doblar una vez. Para ello coger la masa como si fuera una pala, estirar con cuidado y doblar sobre sí misma.
2. Cubrir el bol con film para que la masa no se seque en la nevera. Según la temperatura del frigorífico, colocar el bol en uuna balda superior (si es muy baja) o en una inferior (si no enfría mucho o la nevera se abre constantemente). Al día siguiente, la masa gana volumen. Si no hubiera crecido, dejar a temperatura ambiente durante una hora.
3. Con cuidado, dar la vuelta a la masa sobre la mesa enharinada y formar un rectángulo con delicadeza.
4. Cortar dos piezas largas del mismo tamaño.
5. Para decorar las piezas, pasar por un paño húmedo y luego por una capa de semillas. Colocar las barras en una pieza de papel de hornear con cierta distancia entre ellas.
6. Retorcer cuidadosamente las barras hasta crear un pan con forma helicoidal. Dejar que fermenten un par de horas.
7. Precalentar el horno a 250ºC con una bandeja metálica en el fondo. Cuando alcance la temperatura, meter las barras, creando antes un golpe de vapor. ¿Cómo? Verter medio vaso de agua en la bandeja metálica ya caliente. Transcurridos 10 minutos, bajar la temperatura a 220ºC, retirar la bandeja y continuar la cocción otros 25 minutos.
Para obtener una corteza más crujiente, apagar el horno y dejar que la pieza reporse en el interior otros 20 minutos con la puerta entreabierta.
TRUCO: atrévete a hacer no solo barras, sino también hogazas o bien chapatas sin amasado, para lo que deberás añadir 400-420 gr de agua más.
Todas las imágenes y explicaciones de © Ibán Yarza pertenecen al libro Pan casero, de Larousse.