Hay vida más allá de las patatas fritas. Debes saber que este tubérculo es de los alimentos más versátiles en la cocina y está admitido incluso en dietas de adelgazamiento, eso sí olvídate de freírlas.
Patatas Hasselback
Cortar, sin llegar a la base 4 patatas. Salpimentarlas, regarlas con aceite y unas hojas de tomillo y coronar con una pizca de mantequilla. Hornear 40-45 minutos a 200º C.
Patatas revolconas
Cocer 1/2 kg de patatas. Saltear 1 chorizo y 2 lonchas de panceta. Saltear 1 cucharada de pimentón dulce y las patatas cocidas y machacadas. Remover y servir con la carne.
Patatas guisadas con níscalos
Pochar en una olla 1 cebolla y 2 dientes de ajo. Añadir 500 g de níscalos y 1 cucharada de pimentón dulce. Mezclar y sofreír. Verter 1,5 l de caldo, llevar a ebullición y agregar 1 kg de patatas chascadas. Cocer 40 minutos a fuego lento.