Recuerda que se trata de una cena informal y relajada cuyo objetivo es pasarlo bien.
Decide día, hora y número de invitados.
No debe ser muy elevado para que todos podáis disfrutar. Prepara la zona del salón para jugar. Despeja la mesa de centro y coloca algún mueble auxiliar para las bebidas y las cajas de los juegos. Comprueba que hay asientos para todos, ten a mano algún puf o taburete adicional, no olvides colocar cojines en el sofá para estar cómodos y ten la zona muy bien iluminada.
La comida, mejor que sea fría o templada, con platos sencillos y ligeros: aperitivos, ensaladas, pizzas, tortillas y algunas tablas de embutidos y quesos. Presta especial atención al menaje y a los accesorios. En cuanto a la bebida, no puede faltar vino, refrescos y cervezas bien frías. Reserva los cócteles y las copas para el momento del ocio.
Zona de cuches
Dispón una zona con chuches para la hora del juego: cuencos con varios tipos de caramelos, brochetas de gominolas y una buena dosis de palomitas.