Cuenta la leyenda que el kéfir fue un regalo de Mahoma a los monjes ortodoxos del Cáucaso, pero en realidad se sabe que se consume desde hace muchos más años atrás. Los musulmanes llamaban al kéfir Los granos del Profeta Mahoma y lo consideraban como un maná de Alá.
Hoy en día sabemos que es un súper alimento por sus muchas propiedades beneficiosas para el organismo. El kéfir es rico en vitaminas del grupo B y vitamina K, calcio, magnesio y fósforo.
Así que hoy os traemos un plato que os va a encantar: Sopa de kéfir con huevo y patata
INGREDIENTES (4 personas):
- 1/2 litro de kéfir
- 2 patatas
- 2 huevos
- Cebollino
- Menta fresca
- Perejil fresco
- 1/2 cucharadita de ajo en polvo
- 1 pepino
- Sal
- Pimienta
Paso 1
Pelar las patatas. Ponerlas en una olla al fuego con un poco de sal. Dejar cocer entre 20 y 25 minutos y, una vez cocidas, retirar del fuego y meterlas en agua fría. Secarlas y cortar lo más fino posible; reservar.
Paso 2
Poner un cazo al fuego con agua y un poquito de sal. Echar 2 huevos y, una vez el agua está hirviendo, cocer los huevos 10-12 minutos. Pasado ese tiempo, sumergirlos en agua fría. Pelar y picar fino.
Paso 3
Pelar y picar el pepino. Poner en una sopera el kéfir, sal, pimienta y ajo en polvo. Agregar agua hasta que quede una crema ligera. Añadir el pepino, patata, huevos y pimienta. Espolvorear con las hierbas; servir.