La constante presión consumista nos ha llevado a ser expertos acumuladores de todo tipo de ítems. Moda, tecnología, recuerdos... Y lo cierto es que los expertos en Feng Shui aseguran que la acumulación de todos estos objetos en nuestras casas no nos traen más que efectos negativos.
Ya lo decía Marie Kondo, para cambiar nuestras vidas, debemos cambiar nuestra casa. Ser ordenados es clave para ello. Los beneficios de cambiar nuestos hábitos de orden y limpieza se ven al instante: mayor paz, armonía, calma con uno mismo. De hecho, a nivel económico, vendiendo en mercados de segunda mano todo aquello que no usamos, nos reporta incluso beneficios económicos.
Más allá de la economía, hay tres razones por las que ser más ordenados nos hará más felices:
SERÁS MÁS PRODUCTIVO
Te costará menos encontrar cualquier cosa en un lugar ordenado. Acumular, no es compatible con productividad.
DORMIRÁS MEJOR
La misma filosofía se puede aplicar al dormitorio. Un lugar limpio y ordenado, hará que la mente desconecte mejor y el desorden no distraiga en la tarea del descanso.
SERÁS MUCHO (PERO MUCHO) MÁS FELIZ
Sí, el orden trae felicidad. Los lugares desordenados no traen más que energías negativas y deprimentes. Ponle freno y carga tu casa de optimismo gracias al orden.
Comienza hoy mismo... ¡y sé feliz!
