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Cuando la presión del agua en casa no es lo suficientemente potente, el agua gotea de los grifos y la lavadora tarda una eternidad en llenarse, y el problema no es otro que la baja presión del agua. Se trata de un problema de fontanería relativamente común que puede deberse a varias causas, desde tuberías obstruidas en el sistema municipal de aguas hasta componentes desgastados en un pozo de agua privado. La buena noticia es que, en la mayoría de los casos, el problema puede corregirse con una inversión mínima de tiempo o dinero.
Es útil tener unos conocimientos básicos sobre presión y caudal antes de desmontar las tuberías y realizar todo tipo de pruebas, o antes de llamar a fontaneros, al departamento de aguas municipales o a un profesional de pozos. Los términos están interrelacionados, pero no son idénticos. La presión es la fuerza que ejerce el agua medida (en este caso) en libras por pulgada cuadrada. El caudal es la velocidad a la que se mueve el agua, medida (en este caso) en galones por minuto.
Tu casa puede tener la presión que necesita, pero aún así tener bajo caudal. ¿Por qué? Obstrucción. La corrosión y la acumulación de cal mineral en el interior de las tuberías impiden que el agua llegue a su destino. Esta es la ilustración más sencilla para describir la compleja interacción que se produce entre su sistema de tuberías y la fuente de agua que lo abastece, ya sea un pozo o un sistema de agua municipal.
Sigue leyendo para descubrir las sencillas pruebas que puedes realizar para descubrir el origen del problema.
¿Qué hacer cuando hay poca presión del agua?
Se considera baja presión de agua cualquier lectura que sea inferior a unas 40 libras de presión por pulgada cuadrada (PSI). En la mayoría de los hogares, la presión del agua debe estar entre 40 y 60 PSI, siendo 50 PSI lo ideal. He aquí una forma rápida y precisa de calcular la presión del agua en su hogar:
Cómprate un manómetro. Aprieta el racor hembra del manómetro en un grifo de jardín. Comprueba que todas las válvulas más cercanas al contador de agua estén completamente abiertas (en el caso de un sistema de pozo, serían las válvulas más cercanas al depósito de presión de la casa). A continuación, abre completamente el grifo de la manguera y lea la presión del agua en el dial de aguja del manómetro. Si la presión es inferior a 2,8 kilos/cm2, la presión del agua es baja.
Cómo se calcula el caudal del agua
El caudal de agua se mide como un índice, una cantidad dividida por una unidad de tiempo (la presión no depende del tiempo). Si la demanda de agua supera la cantidad que el sistema puede suministrar, entonces puede parecer que su casa tiene poca presión de agua, cuando podría no ser así.
Este ejemplo puede ayudarle a entenderlo. Supongamos que su casa tiene un suministro de agua que puede producir unos 10 galones de agua por minuto. Eso está bien, a menos que la lavadora esté encendida y utiliza 22,73 litros por minuto (l/min), alguien se esté duchando y utiliza 13,64 l/min, y el lavavajillas esté funcionando a 18018 l/min, lo que resulta en una demanda de 54,55 litros de agua por minuto.
En este caso, el sistema de suministro de agua de 22,73 l/min no es capaz de satisfacer la demanda, por lo que parece que la presión del agua es baja. A continuación le indicamos cómo comprobar el caudal de agua de tu hogar:
- Revisa todos los grifos y electrodomésticos de la casa, porque consumen agua están cerrados.
- Conecta una manguera de jardín a un grifo exterior y coloca tres cubos de cinco galones vacíos.
- Abre el grifo a tope y empieza a llenar los cubos. Para después de 60 segundos y mide cuánta agua has captado en los cubos.
Un hogar medio consume de media 133 litros por habitante y día, por lo que el caudal ideal sería de entre 0,47 y 0,51 litros por segundo. Ahora que ya conoces la presión del agua y el caudal, veamos tres formas de resolver los problemas de suministro de agua.
Cómo saber qué presión de agua tiene mi casa
Si tu casa está conectada a la red municipal de agua, llama para comprobar que no ha habido ningún corte y pide que comprueben la presión del agua para confirmar que la presión es la adecuada. Si no encuentran ningún problema en la tubería principal, el problema está en el sistema de suministro de agua de su casa.
Si extraes agua de un pozo y la presión es baja, tendrás que contratar a un experto para que inspeccione la bomba de agua del pozo y el depósito, que presuriza el agua una vez bombeada del pozo a la vivienda.
Cómo funciona la válvula reductora de presión
Una forma rápida y sencilla de aumentar la presión del agua en las casas conectadas a la red municipal es ajustar la válvula reductora de presión, que se encuentra en la tubería principal de suministro de agua. Busca una válvula de forma cónica junto al contador de agua, cerca de donde la tubería principal de agua entra en la casa.
En la parte superior de la válvula sobresale un tornillo roscado. Para aumentar la presión, afloja la contratuerca del perno y gíralo en el sentido de las agujas del reloj. Utiliza el manómetro para determinar cuándo alcanza una presión de agua en torno a 50 PSI. A continuación, aprieta la contratuerca para fijar la válvula.
En las viviendas abastecidas por un pozo, es posible que puedas ajustar la presión de entrada y de salida para el depósito de presión y la bomba del pozo, aumentando así la presión del suministro de agua. Al ajustar la presión del sistema para que sea más alta, la bomba del pozo funcionará con más frecuencia y aumentará el consumo eléctrico, pero la presión del agua dentro de la casa será más alta.
¿Cómo resolver los problemas de presión del agua?
Cuando todos los demás métodos para aumentar la presión del agua hayan fracasado, contrata a un fontanero para que instale un bomba de aumento de presión de agua. Estas bombas eléctricas, compactas pero potentes, se introducen en la tubería de suministro de agua, donde turboalimentan la presión entrante y la elevan al nivel adecuado. Ten en cuenta que tendrás que añadir el coste de la mano de obra, que se ajustará a la dificultad del trabajo.
Cómo funciona una bomba de agua por golpe de ariete
Aumentar la presión del agua es a veces un proceso de ensayo y error. Es posible que cuando tomes medidas para aumentar la presión, de repente la fontanería de la casa sea más ruidosa que antes, especialmente en la lavadora o el lavavajillas ya que están sueles tener válvulas que se abren y cierran para controlar el caudal de agua. El agua puede chocar contra la válvula cerrada, produciendo un fuerte ruido como de martilleo.
Este fenómeno se denomina golpe de ariete o ariete hidráulico y se produce en los electrodomésticos y en los codos en ángulo recto de las tuberías. Además de ajustar la presión del agua de la vivienda, es posible que tengas que instalar un supresor de golpes de ariete, básicamente un amortiguador para un sistema de fontanería. Si eres manitas y tiene conocimientos básicos de fontanería, podrías intentar instalarlo.
Vía: Popular Mechanics
