Hearst
Al colocar un friso, debes empezar por el lado más visible, ya que el último listón habrá que cortarlo y no queda tan bonito.
También puedes realizar el cabecero con papel pintado enmarcado con una moldura estrecha.
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Personaliza el zócalo de tu dormitorio
Ideas: Sobre el cabecero, realiza una composición decorativa de cuadros, fotos o espejos, como en este dormitorio tan coqueto.
Guirnalda de luces, de Ikea. Ropa de cama, de A Loja Do Gato Preto.
- Friso.
- Listones de madera.
- Remates para las esquinas.
- Cantonera y rodapié.
- Perfiles.
- Grapas.
- Pegamento No más Clavos, de Pattex.
- Nivel.
- Tornillos y tacos.
- Martillo, metro y lápiz.
- Sierra de calar. En Leroy Merlin.
Paso 1: Mide la pared el cabecero
Marca en la pared la altura a la que deseas colocar el friso ya cortado a medida (1,30 metros de altura). Fija en ella con tacos y tornillos tres listones de madera en horizontal: uno sobre el rodapié, otro hacia la mitad y un tercero, en la parte superior.
Paso 2: Coloca los listones
Las piezas del friso tienen unas pestañas que encajan una dentro de otra y se clavan a la pared con grapas especiales. Utiliza un nivel para asegurarte que los listones están perfectamente alineados y para evitar torcerte al colocarlos.
Paso 3: Haz un hueco para los enchufes
Cuando llegues a los enchufes, dibuja sobre el listón su perímetro, córtalo con la sierra y lija los bordes. Si no cabe una pieza entera al final del friso, córtala a medida. Pega con No más Clavos el rodapié, la cantonera superior y la de las esquinas.
Paso 4: Embellece con perfiles
Para rematar los huecos de los enchufes, coge su medida, trasládala a los perfiles y córtalos con la sierra. Aplica en cada uno de las cuatro piezas pegamento No más Clavos y colócalas presionando con los dedos hasta que queden fijas.
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