Pinterest: Stacy Carter Photography Studios
Tras la vuelta de las vacaciones de verano, ¿no sabes qué hacer con las 3.846 fotos que has sacado? Que no cunda el pánico, a continuación te damos ideas de lo más originales y sencillas para decorar tu casa con los manualidades fáciles que puedes hacer cuando quieras.
El verano sirve para resetear cuerpo y mente y recobrar energías. Este año márcate un compromiso cuando llegue a su fin: evitar el ritmo acelerado de la vuelta al trabajo y cuidar el descanso nocturno.
- Evoca los paseos por la playa o ese momento de relajación junto al mar con un bodegón de elementos decorativos en tonos azules.
- El poder de una imagen para trasladarte al instante a cualquier lugar es por todos conocido. ¡Decora con fotos, láminas y cuadros que te lleven a tu paraíso vacacional!
- Las mañanas sin prisas, sobre todo durante los fines de semana, con tiempo libre para leer mientras la luz del sol entra por la ventana… Vuelve a sentir que aún estás en modo vacaciones con texturas naturales y una pincelada azul.
Convierte el regreso a casa en una nueva oportunidad para redecorar algún rincón de tu hogar al que le haga falta. Si disfrutas en la cocina ¡adelante!, empieza por ella. Cambia el color de un mueble —si es azul, tendrás el mar a un paso—, y da más protagonismo a detalles decorativos evocadores, como una figura coralina, artesanía o cerámica.
¿Dónde poner los recuerdos de viajes?
Seguro que una de las ideas más recurrentes para que no tengas morriña de tus vacaciones es revisar las fotografías que has hecho durante el verano o en el gran viaje que haces cada año. A nosotros nos encanta que estos recuerdos formen parte de la decoración de tu casa, así que te invitamos a que crees bonitos murales con estas 35 ideas para decorar las paredes con cuadros y fotografías.
También hay otras opciones, porque ¿crees que la decoración puede prolongar la sensación tan positiva que sientes junto al mar? La respuesta es sí. Para ello te proponemos transformar aquellos momentos de felicidad en algo tangible: arena, conchas, caracolas y cualquier detalle que asocies con la costa. Añade texturas naturales y uno o más tonos de azul para recrear una estampa que vincules a las experiencias estivales.
Otro excelente consejo es recrear las claves del estilo marinero en tu casa, pero intenta evitar la saturación. Utiliza anclas, peces, gaviotas, palmeras, redes, faros, remos, veleros e incluso aros salvavidas. Cualquiera de estos elementos , siempre que se utilice de forma sutil, puntúa doble a la hora de decorar. ¿Cuántos de estos elementos significan algo para ti realmente? Quédate solo con los que te permitan regresar en el tiempo para recordar los buenos momentos vividos. Por ejemplo, jugar con piezas que repliquen las tonalidades del mar es un excelente punto de partida.
Ahora solo te queda ponerte manos a la obra y disfrutar con la realización de estas manualidades para decorar tu casa tras las vacaciones. Estas manualidades DIY son perfectas para hacerlas tú mismo o con tu familia. ¿Cuándo empiezas?
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Estilismos que te funcionarán
Haz pruebas hasta conseguir un look de revista que te transmita las buenas vibraciones de las vacaciones. Figuras con formas marinas, tejidos que tengan textura, cerámicas de prints atractivos, flores, caracolas… y voilà!
Coral, de Cox & Cox. Platos, de arriba abajo: en tonos degradados, Glacier, de Lucia Fraser en Heal’s; con salpicaduras, de Kana London; y con rayas, de The Conran Shop.
Realización: Amy Neason.
Utiliza las conchas y las caracolas que encuentres en la orilla para realizar una guirnalda. Busca un lugar donde destaque, porque este tipo de detalle eco-friendly aporta ese toque tan natural que derrochan las casas de la costa. Engarza las piezas con cuerda y haz el nudo debajo para que no se muevan. Plus de estilo, alternar botones de nácar, plumas, flores, hojas, ramas...
Si te has quedado sin ideas para decorar esas piedras que cogiste en la playa o la montaña, ¿por qué no las envuelves con los mapas de los lugares que has visitado?
Para hacer este móvil tan chulo sólo necesitas unas ramitas, una cuerda larga, varias pinzas mini... ¡y tus fotos de las vacaciones!
Elige las conchas marinas más bonitas que tengas y utilízalas para crear este móvil tan especial. Si añades unos cascabeles al final y lo colocas en la terraza, ¡controlarás el nivel del viento!
En lugar de decorar las paredes con cuadros, ¡crea tu propio mural con fotos de las vacaciones! Un truco: dale la misma gama de tonos y tamaños a todas las imágenes para que quede más bonito.
Si lo tuyo con la Polaroid es amor del bueno, ¡mira lo bien que luce esta pared decorada con fotos!
Si prefieres darle un aire informal a las paredes, puedes crear un móvil de fotos con varias cuerdas colocando cada imagen de forma diferente, ¡como si hubieran llovido por encima!
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Vivificante, como la brisa
El cristal turquesa y aguamarina de las botellas decorativas crean una estampa de color y brillo con una luminosidad extraordinaria que nos recuerda a los días de sol radiante.
Tienes jarrones similares en Amazon, Ikea, La Redoute Interierus, Maisons du Monde…
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Valen más que mil palabras
Allá donde vayas puedes comprar a los artistas locales láminas que evoquen ese viaje que acabas de hacer, —en tiendas, galerías o mercadillos— o buscar en Posterlounge, Yellowkorner y Drimdeco By Cuadriman esa obra que te permita viajar siempre que quieras.
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Sábanas con motivos del mar
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Un restyling con encanto
En la cocina recrea los colores de la playa: azules, arena... En esta cocina la isla de la cocina se ha pintado de azul y la vitrina alacena el color arena te recordará los paseos por la playa.
En esta alacena Nantes, de Cox & Cox, la distribución de cada balda es puro arte. Aparador, de Loaf. Fuente Bergaya, en teca, de Caravane. Lámpara, de Habitat. En el suelo, cuenco tallado a mano de Design Vintage. Alfombra Lohals, de Ikea, en yute.
Realización: Amy Neason.
¡Ah! Y esos tesoros que recogiste en la playa, colócalos a la vista para que te recuerden el sosiego y la vida tranquila estival.
Sillón, de Ikea. Mesa, de Muuto. Bandeja, de Skagerak. Servilleta bordada, de The Conran Shop. Bol y vaso, de Kana London. Lino Cellini, de la firma Romo. Suelo de vinilo en roble, de Carpetright.
Realización: Amy Neason.
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En calma este otoño e invierno
Crea un dormitorio relajante con una decoración rica en materiales y acabados naturales. Colores neutros, toques azulados y pátinas desgastadas logran en esta habitación el aspecto sencillo de una antigua casa de pescadores rehabilitada. En el marco antiguo recuperado, algodón de rayas Linhope, de la firma Jane Churchill, distribuida por Gastón y Daniela. Lámpara de techo, similar en Ay illuminate.
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Caracolas y estrelas de mar
Hasta que decidas en qué vas a reutilizar los tesoros que las olas arrojan a la orilla, guárdalos siempre en el mismo sitio para tenerlos localizados. Para este fin, no dudes en reciclar las cajas de fruta e identificarlas según su contenido.
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Para colocar tus velas aromáticas
Elige un jarrón de vidrio transparente y rellénalo con la arena y las conchas de esa playa tan especial. ¡Quedará precioso!
No hace falta ser muy mañosa para realizar bonitos cuadros con recuerdos marinos. Sólo tienes que comprar unas cajas pequeñas, rellenarlas con cuentas de cristal y colocar estrellas de mar y conchas. Expónlas formando una serie. Cajas, de Ikea.
Si vives en zonas de interior y echas de menos la playa, aprovecha los tarros de mermelada o legumbres para guardar en ellos tus souvenirs de vacaciones. Lávalos bien y dispón a tu gusto conchas, piedras, caracolas o maderas que aporten calidez a los fríos días de invierno. Bote con tapa hermética Korken, de Ikea (2,50 €).
La visión de un mantel agitado por un viento ligero provoca sensación de frescor. Y lo mismo sucede con un visillo que aletea en la ventana cuando se crea corriente dentro de la casa. Para que los tejidos mantengan una cadencia suave en el movimiento y no vuelen de forma caótica, coloca en la base un pequeño contrapeso. Por ejemplo, unas pinzas decoradas con una piedra pintada, con conchas marinas o con imanes de formas divertidas.
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