Trucos para vestir tu casa de otoño

En otoño las tardes son más frías, pero hay horas en las que se puede disfrutar con comodidad de la cálida luz de esta estación, en la terraza, al abrigo de una manta cálida y con una taza de algo calentito en la mano. Así también se disfruta del otoño.

Cada vez es más frecuente disfrutar de terrazas, patios, jardines y balcones en los meses fríos. Así que saca las mantas al exterior y alarga la temporada de terraza.

Foto, de la firma Affari.

¡Cambio de armario! Los textiles más ligeros de la casa se recogen. Es el momento de volver a sacar los tejidos más gruesos y cálidos. La lana es un must de la temporada. También vuelve el pelo y ¡el fieltro! Las mantas, a la vista, van a volver a la vida.

En la imagen, todo, de Ikea.

Aunque los tejidos son más gruesos y los colores oscuros vuelve a apetecer, deja que la luz del otoño se cuele por las ventanas. Nada de cortinas pesadas. Las estancias siempre agradecen la luz natural.

Y si las vistas merecen la pena, coloca cerca de la ventana una butaca o chaise longue para ver caer las ojas de los árboles desde casa. ¡Qué poético!

Foto, de la firma Ib Laursen.

Dos de esos materiales que combinan bien. La pareja otoñal por excelencia. La madera, siempre encaja y aporta su calidez, tan necesaria en los meses más fríos. Y combinada con cuero... ¡perfecto!

Así que incorpora cuero: una alfombra, una butaca, cojines... ¿Te has fijado en el detalle de la lámpara en cobre? Es otra de las tendencias de la temporada. ¡Viene con fuerza!

¿Y si los renovamos? Opta por cristal y cerámica de colores. En el otoño, el color no desaparece, pero los tonos se empolvan.

Mira esta composición repleta de encanto con unas flores secas.

En la foto, todo de la firma Parlane.

¿Más cálidas? Se puede. Limpia y guarda las de verano y saca las de otoño-invierno. Y si son las mismas, haz una puesta a punto para que luzcan como el primer día.

Va a apetecer tirarse en el suelo con cojines, delante de la estufa o la chimenea. ¡Seguro!

Foto, todo, de Ib Laursen.

Traen siempre asociados los cálidos rojos, calderas, naranjas, amarillos... pero los azules y verdes también encajan. Ningún color está prohibido.

Lo cierto es que en los meses más fríos los tonos más subidos de intensidad reaparecen con más fuerza. Los empolvados también tienen más fuerza, pero se llevan tanto. ¡A por ellos!

Foto, de Sia.

Continúa siendo tendencia. Madera en acabados naturales y blanco de fondo. Aunque el estilo nórdico apuesta en esta temporada por tonos pastel, piezas realizadas en corcho... aunque sin perder su esencia.

Copia el estilo de este ambiente: nórdico por el diseño del mueble en madera, luminoso por el color blanco y tierras predominantes y cálido por las texturas y matices que aportan los tejidos.

Foto, de Decopraktik.