Decorar con aire retro

Los muebles de tubos de acero, que revolucionaron el diseño en 1925, siguen arrasando hoy. En este salón, la mesa de centro se inspira en el modelo Laccio, de Marcel Breuer, y el papel, geométrico y repetitivo, anuncia la psicodelia, pero aún en un discreto tono beis, nada chillón. Mesas: alta, de Domus (139 €) y baja (desde 265 € en La Oca). Papel, de Coordonné. Sofá, de La Oca. Lámpara, de Aldaba. Butaca giratoria, de polipiel (135 € en El Apartamento). Jarrones, de La Oca. Cojines, de Domus.

Los diseños de líneas depuradas que triunfan hoy causaron sensación hace décadas, cuando se buscaban muebles simples, racionales y económicos; incluso el MOMA de Nueva York, entre 1947 y 1950, creó un concurso de “muebles a bajo coste”. Mesa (149 €) y sillas (34,95 € c/u); de Ikea. Lámpara y alfombra, de La Oca. Vitrina y aparador, de Domus. Cuadro, de El Apartamento. Jarrones: alto, de MH Interiorismo y bajos, de Diedro.

En los años 50 y 60 se produce un cambio radical en el aspecto de los muebles por la influencia en todos los diseñadores de la escuela alemana Bauhaus. Por ejemplo, algunos sillones cambian las cuatro patas por una única con base circular, y el plástico moldeado permite crear mesas nunca vistas… Sillón (230,70 € en Aldaba). Mesa (145 € en El Apartamento). Cortina de organza (50 €) y manta, de Aldaba. Lámpara, de La Oca.

Afortunadamente, hay mercadillos, anticuarios y almonedas donde podrás encontrar auténticos tesoros. Butaca de los años 50, de origen alemán, retapizada con una tela de la última colección de Designers Guild (590 € en El Apartamento).

Hoy, los jarrones de cristal son cada día más espectaculares… Pero las formas actuales que te resultan tan refinadas tienen mucho que ver con maestros cristaleros, como René Lalique, o con el vidrio sueco que se convierte a mediados del siglo XX en competidor del vidrio de Murano. En esta foto, los jarrones con forma de lágrima son de vidrio doblado, es decir, tienen dos capas: una con color y otra transparente (31,90 € c/u en Batavia); el alto está decorado con una espiral naranja, ya utilizada hace décadas (20 € en Diedro).

Los muebles y complementos de los 50 son mucho más discretos que los de los 60 y 70, marcados por la explosión de color. Estas cajas, de Domus, en polipiel blanca, encajan en un ambiente retro, sin estridencias; el juego de dos (81,90 €).

El atractivo que tú ves en los muebles de plástico, también lo vieron los diseñadores en los años 50. Experimentaron con él por ser un material fácil de moldear, por sus posibilidades cromáticas y su bajo coste. Mesas: azul con revistero, de Kartell (153 €) y transparente (172 €); en La Oca. Lámparas: de techo (220 e en Ideas Luz) y de mesa (30,50 € en Batavia). Panel de tela en 3 x 0,60 m, de Ikea (14,95 €).

Muchas de las lámparas más codiciadas hoy por sus formas poco convencionales llevan siendo auténticos bestsellers del diseño desde el siglo pasado. Lámparas: flexo Clea, de Marset, con aire pop (98,65 €); y con pantalla de charol y base de plástico brillante con forma de pedestal, inspirada en la serie de muebles Tulip de Eero Saarinen (595 € en La Oca); en segundo plano, lámpara con piezas de nácar en cascada (131,89 € en La Oca); con bolas de cristal (167 € en Ideas Luz); y con difusor en forma de paraguas (195 € en Batavia).