La vuelta del papel pintado
Tras años en el olvido, los estampados llamativos vuelven con fuerza a las colecciones de papeles pintados. Eso sí, es tendencia utilizarlos sólo para dar énfasis a determinados espacios como la pared del cabecero, la zona del comedor o un zócalo en el pasillo. Papel Sakura, de la serie Tamika, de Harlequin (79,5 €/rollo).