Las lámparas tienen la capacidad de cambiar el estilo de cualquier habitación, ¡incluso apagadas!
1. Primera impresión: Lámparas en el recibidor
Los recibidores suelen ser estancias pequeñas y oscuras. Es importante cuidarlas, pues es la primera imagen que nuestros invitados tienen de la casa. Combina lámparas de techo con apliques, para evitar sombras, y pantallas de color, para dar luz y calidez a la habitación. Este hall es de Ikea.
2. Toma medidas: Lámparas en el comedor
Colocar una lámpara colgante sobre la mesa es una apuesta segura. Si es redonda, una, y si es grande y rectangular, al menos dos. La distancia entre mesa y lámpara debe ser de unos 75-80 cm. Un ambiente de Kenay Home.
3. Materiales: Lámparas en el salón
Elige un modelo de acuerdo con el resto de la deco de la estancia. De cristal, para hogares de aire moderno, y de metal, para uno de aire industrial. ¡Cuidado con los brillos extras! De plástico, para habitaciones infantiles, y de fibra natural, para ambientes rústicos. Salón de La Redoute Interiors.
4. De pie: Lámpara para un rincón de lectura
Para un rincón de lectura, lo mejor es un flexo o modelo de pie que ilumine directamente el libro. Elige uno de un tamaño similar al resto de los muebles y así conseguirás un efecto acogedor y cálido. Este espacio es de Kenay Home.
5. ¡No te cortes! Lámparas en la cocina
En la cocina, combina la luz general con luces puntuales sobre la mesa y en la encimera, para comer y cocinar seguros. Elige bombillas con un alto índice de rendimiento cromático, a partir de 80 IRC, para reproducir mejor la luz natural y no alterar el color de los alimentos. Cocina de Ikea.
6. Zonas de paso: Lámparas en el pasillo
En los pasillos, focos halógenos orientables para evitar molestas sombras. Si tienes algún mueble o aparador, coloca sobre él un bonito flexo, crearás un ambiente más cálido y podrás realzar tu objeto decorativo favorito. Una imagen de Banak Importa.
7. Seguridad infantil: Lámparas para el cuarto de los niños
Para las habitaciones de los peques, recubre o protege bien la fuente de luz; evitarás que se quemen los dedos. Mezcla diferentes sistemas, para adaptar la iluminación a cada actividad. Junto a la cama, pon una lámpara dirigible y otra para los miedos nocturnos.
8. Flexos gigantes: Lámparas para zonas de estudio
Lámparas extensibles o de trípode son los diseños ideales para un ambiente desenfadado y juvenil. En zonas de estudio, opta por modelos que se puedan regular en altura y enfocar según las necesidades. Espacio de Maisons du Monde.