Las habitaciones, muy espaciosas, cuentan con una zona de escritorio.
Todas están decoradas de forma distinta para que cada ambiente sea irrepetible. Los únicos elementos comunes a todas ellas son los arquitectónicos: suelo de barro y carpintería de madera pintada en color verde agua. La propietaria del Molí El Canyisset es la galerista de arte Rina Bouwen, y los cuadros que decoran sus paredes son obras de los artistas que exponen en su galería.