Lo que comenzó siendo una cuenta de Instagram para ayudar a Jessica y a su marido Erik en la adopción de gatitos, terminó convirtiéndose en un nuevo concepto de alojamiento donde los auténticos reyes son los mininos.
Y es que lo que Jessica ofrece en su particular Airbnb son estancias donde los huéspedes conviven con los gatos, dejándose mimar (y siendo mimados) en todo momento salvo a la hora de irse a dormir, ya que de esta forma se respeta el sueño de los inquilinos y los animales no corren ningún riesgo innecesario.
"los huéspedes conviven con los gatos, dejándose mimar (y siendo mimados)".
Durante tu estancia, además de tomar el aire en la terraza y disfrutar de las increíbles vistas desde el rooftop, puedes sencillamente disfrutar el tiempo que quieras con los gatos o implicarte en su cuidado, ambas opciones son bienvenidas.
Aunque si quieres ir más allá y ayudar a Jessica en su proyecto, puedes realizar un donativo o, ¿por qué no?, adoptar uno de los gatos. ¿No sería maravilloso volver a casa con un nuevo habitante?