IDEAS PARA ELEGIR TU MESITA DE NOCHE
- Medidas. El ancho de cada mesilla dependerá del espacio disponible a ambos lados de la cama. En el caso de que sea mini, agudiza el ingenio: lámparas instaladas en pared o suspendidas del techo y baldas y/o mesillas a medida serán tus aliados.
- Otras soluciones: recurrir a las hornacinas de obra y a cabeceros cuyo diseño y grosor (unos 7 cm) permitan ser utilizados como repisa para dejar los básicos, como el despertador, el móvil y un libro. Lo que sí se aconseja es que la altura se adapte a la cama. Conviene saber qué altura total tienen el somier y el colchón y entonces, comprobar la de la mesilla, para evitar sorpresas.
- Almacén. La capacidad para guardar y el buen diseño no están reñidos. Las mesillas suelen incluir uno o dos cajones, —que se aprovecharán mejor con bandejas organizadoras— y alguna balda, pero no hay nada escrito. Eso sí, en las que tienen una estructura abierta, no hay secretos y el orden es un must.
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Mesilla con balda en el sobre
¿Todas las mesillas deben incluir cajones? Depende de lo que necesites tener a mano desde la cama. Cuando son libros, una mesilla como ésta, con una balda en el sobre, puede ser suficiente (119 €). Su aire factory forma un buen dúo con la lámpara retro, de IB Laursen (69,80 €). Cajas, de House Doctor. Todo, en Car Möbel.
Las mesillas acompañan a la cama, la pieza más
visible del dormitorio, así que es imposible no verlas, y por ello, su diseño debe sumar estilo al ambiente, no restarlo. Está en juego que la cama se realce y gane presencia o que su imagen se devalúe. Pero además cumplen una función práctica: tener acceso a los objetos básicos para cada persona. En función de ellos, se elegirá una mesilla, con unas u otras características. Espejo (29,90€) y joyero (7,90€), de Rice.
Eso sí, en las que tienen una estructura abierta, no hay secretos y el orden es un must. Cajonera Tyssedal, de Ikea (199€).
La madera clara y el blanco se conjugan en esta mesilla con dos cajones, una pieza que, por su look, es fácil de combinar con muebles de diferentes estilos. Sobre ella, una lámpara total white añade un plus de diseño. Mesilla Bambi (199€); lámpara Seren (71,50€) y cabecero son de Kenay Home.
Este modelo con dos cajones ha crecido y ha ganado capacidad de almacenaje, con un módulo adicional, abierto, práctico para dejar los cuentos y los pequeños tesoros, de más uso. Ahora, además, es móvil, porque se han atornillado ruedas. Con encanto, el despertador, la caja pongotodo y el cuadro. Mesilla (95€); módulo (36 €); flexo
(49,90 €) y despertador (13,90€); de Car Möbel.
Las mesas auxiliares de salón también se pueden trasladar al dormitorio. En este caso, es una mesilla que forma parte de un set de mesas nido. Su diseño depurado y su color negro armonizan con la lámpara y los textiles de lino. Un joyero de mármol y un jarrón texturado completan este rincón con juego de claroscuros, de inspiración 100% nórdica. Mesa de hierro (430€ /juego de 3), lámpara (113,50€ ) y ropa de cama, son de la firma Broste Copenhagen.
En decoración, menos es más. Y así el sobre de mármol de esta mesilla de hierro puede lucir su belleza. La lámpara negra, con una pincelada dorada en su base, suma estilo a este tándem sofisticado, de la firma Hübsch. Mesilla (200€); lámpara (150€); y cojines (desde 60 € c/u).
Mesilla con barra multiuso
Aprovechar las paredes, y al mismo tiempo, decorarlas, es posible, como se demuestra aquí.
La mesilla, con cajón y balda, se complementa con una barra multiuso y unos estantes ultrafinos; dos diseños versátiles, que no recargan el espacio. Sobre la mesilla, despertador y agua, dos básicos. Mesilla Trysil, de Ikea (34,99 €).
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