Un armario customizado
Fórralo con un papel pintado o una tela vistosa. Como la cola tarda en secarse, te permitirá rectificar si te tuerces al pegarlo. Dentro del armario, caja gris Kvarnvik, de Ikea (5,99 €).
Cómo hemos personalizado este armario: primero, forra el interior del mueble con la tela; para ello, toma las medidas de cada lado y trasládalas al papel. Coloca cada plantilla sobre la tela, marca y corta con cuidado, para evitar que la tela se deshilache. Retira la balda del mueble. Aplica cola sobre la madera y, sin estirar la tela, pega cada pieza desde arriba hacia abajo. Empieza por el fondo, sigue por los laterales, el interior de la puerta y la balda. Con los restos de tela realiza un pompón, a modo de tirador. Corta 8 tiras, júntalas, dóblalas por la mitad y anúdalas con una cinta. Haz un orificio en la puerta, introduce la cinta y haz un nudo como tope. Por último, atornilla las patas.
Materiales que hemos usado para el armario: Armario de pared con puerta Fyndig; mide 40 x 35 x 60 cm (30 €), patas blancas Nipen (15 € cada unidad), tela Ikea PS 2014, en 150 cm de ancho (6,99 €/m) todo, de Ikea. Papel de estraza, cola blanca, tijeras y lápiz, atornillador.