Reserva un espacio con luz natural para la mesa de estudio
Planifica un rincón de trabajo que le sirva con el paso del tiempo. Conviene que la mesa tenga 70 cm de fondo para que en el futuro pueda colocar un ordenador. Aquí, la interiorista Nuria Roigé diseñó una composición a medida realizada con Ir’o, un material muy resistente realizado con resinas y plásticos que se fabrica en 230 colores. No olvides incluir algún estante para que el niño tenga a mano los libros, y una cajonera que le ayude a mantener en orden el material de estudio. Opta por una silla regulable en altura y sitúa una lámpara que proyecte el haz de luz sobre la mesa: así el resto del dormitorio quedará en sombra y evitarás que se distraiga. Material, de Pepa Paper.