Un dormitorio en colores neutros, para niño y niña

Debajo de la ventana se ubica la zona de estudio, que recibe directamente la luz natural. Una encimera corrida con dos puestos y una cajonera central que delimita el espacio entre ambos. La mesa hace las veces de cabecero y mesilla en el lado de la cama. Cojín beis de lino con letras rojas, de Lu Ink (95 €).

En ángulo con el escritorio y concebido como rincón de lectura, la interiorista diseñó una práctica pieza multifunción: un banco con colchoneta y cojines, coordinados con la ropa de cama, y mueble zapatero.
De Filocolore: móvil de estrellas (32 €) y cojines en rosa. Manta blanca, de venta en Zara Home (99,99 €).

La cama superior se apoya en una estructura concebida y distribuida como armario con puertas y cajones. El módulo para la ropa colgada, aunque estrecho, aprovecha el fondo de la cama -al menos un metro-. Una barra extraíble facilita el acceso a las prendas colgadas.

El diseño de los muebles responde a la funcionalidad: los módulos de almacén aprovechan cada recoveco. De Filocolore: guirnalda de banderines blancos (14,50 €) y cesto (56 €). 

“Escondidos” en los compartimentos del banco. Su diseño estrecho es suficiente para convertirlo en zapatero con baldas. Colchoneta,  realizada a medida por Thinking Home. 

El frente de las literas se forró con un zócalo alto en el mismo acabado que el mobiliario, en laca en color arena, para proteger la pared de los roces y conseguir un ambiente más acogedor. Además, gracias al grosor que tiene, acoge las lamparitas de lectura sin que queden a la vista los cables y se convierte en un estante corrido, muy práctico como balda e improvisada mesilla para la cama superior. Cojines, de venta en Filocolore: bordado Kiss (51 €) y Patch Robot (34 €).

Como los pequeños querían estar juntos en la misma habitación, su madre se puso en contacto con un estudio de decoración para que diseñase el mobiliario a medida. La interiorista Cristina Pérez vio la solución en una estructura a medida de literas en tren, que permitía disponer de dos camas fijas de medida estándar y respetar el espacio de juego.

Si los hermanos prefieren dormir por separado cuando sean adolescentes, las literas pueden desmontarse y utilizarse como dos camas independientes.

Manta de cuadros, de venta en Estilo Nórdico (105 €). Plaid en algodón rosa,
en 1 x 1,90 m, de venta en Filocolore (124,50 €). Fundas nórdicas, realizadas a medida por el estudio Thinking Home en tejido de rayas.

1. Estudio doble 

Con dos puestos en línea y ubicado justo debajo de la ventana. Un extremo de la encimera corrida se transforma en mesilla de noche, donde coincide con la cama. Entre las sillas, una cajonera extraíble.

2. Trucos de almacén
En ángulo con la mesa de trabajo, Cristina diseñó un banco de lectura con compartimentos de almacén. El espacio que queda entre este mueble y la pared, y en el que se apoya la mesa a modo de pata, se aprovecha con otro módulo.

3. Literas en tren

Son modulares y también se pueden usar por separado. La superior se apoya en una estructura con escalerilla, armario y cajones.

Un cuarto de diez, perfecto para niños y padres. Bien planificado, con una decoración alegre pero sosegada, zonas delimitadas y mucho espacio de almacén y juego. Alfombra fina de algodón con estrella bordada, en 0,80 x 1,10 m, de Filocolore (59 €). Cojín en blanco con estrellas rosas, realizado por Thinking Home, como las cortinas, confeccionadas en una tela ligera que deja pasar la luz. Manta blanca, de Zara Home (99,99 €). De Ikea: sillas (49,99 € c/u) y lámpara de mesa (25,99 €).

Se optó por una combinación cromática que resultase neutra: una base en arena en paredes y mobiliario (lacado), complementos en color blanco y textiles que introducen notas de color en rojos y tonalidades fresa.