Decía Albert Einstein que “la creatividad es la inteligencia divirtiéndose”, así que si tus hijos tienen una imaginación desbordada y suelen sorprenderte con su ingenio ten claro que necesitan un entorno que aliente su mente despierta. ¿Cómo averiguarlo? Es fácil, tienes desde hace años sus dibujos en la nevera, que renuevan constantemente; les gusta hacer experimentos y, desde que eran pequeñitos, un minuto de silencio significa que algo traman…
El potencial creativo es un don, así que te animamos a que lo actives en su etapa adolescente y, de paso, les alejes de la atracción fatal que sienten por las pantallas. La decoración te ayuda a activar este potencial, solo tienes que ver esta propuesta de la firma Rafa Kids, que diseña muebles modernos en un estilo minimalista.
Su dormitorio es su guarida. El lugar en el que tu hijo pasa las horas muertas, un territorio privado, que le gusta marcar y solo comparte con sus amigos. En esta habitación juvenil sus invitados estarán muy a gusto en la zona chill out, que forma la alfombra en tonos teja y los cojines, aunque dispone de dos bancos de madera para sentarse y una silla colgante, en fibra natural, que seguro que será su favorita.
No puede faltar un punto de luz auxiliar para iluminar la zona de estudio.
Organiza la habitación por zonas, ya sabes que el orden no es una de las virtudes durante la adolescencia. Un par de cestos le ayudarán a recoger la ropa y las zapatillas de estar por casa y también algunos juguetes. Es muy práctico un mueble con cajones a su altura para guardar la ropa.
Para evitar la mente volátil de los creativos, instala un corcho para colgar su calendario escolar y, cómo no, algunos de sus trabajos artísticos. El banco de madera sirve para quitarse o ponerse el calzado y dejar preparada la ropa del día siguiente.
La idea del perchero con cestillos de fibra es muy original. Ayuda a mantener el orden visual y puede ser un buen sistema para organizar sus cosas o los materiales que necesita para sus hobbies: pinceles, cuentas de collares…
La zona de estudio se ha instalado en el centro del dormitorio para aprovechar la iluminación exterior. Es una propuesta minimal, de líneas redondas, y que ahorra espacio, ya que los asientos se esconden bajo la mesa.
La cama es un futón blanco, a ras de suelo, al más puro estilo hippy chic, con grandes cojines para que pueda tumbarse a leer, ver alguna de sus series favoritas y, por supuesto, tener un sueño reparador.
Más información en Rafa Kids.