Ya sea por falta de espacio o por decisión propia, te damos las claves para montar una habitación para dos hermanos, práctica y respetando la personalidad de cada uno de ellos.
Dormitorio unisex para dos hermanos
Los textiles dan el toque especial y personal a la habitación de tus hijos. En la época infantil, los estampados pueden reflejar el pasatiempo favorito de tus niños: fútbol, princesas... Pero, ¿qué pasa cuando los hermanos no comparten aficiones? Pues elige ropa de cama diferente, pero con una base común, así resultará armoniosa y respetará la individualidad de cada niño. Para adolescentes, elige textiles de una sola gama cromática o estampados geométricos.
Elige un papel con fondo neutro y rayas multicolor, perfecto para sexos y edades diferentes.
Paredes con arte. En los dormitorios de bebés es muy habitual poner papel pintado con formas geométricas. Para cuando son un poco más grandes, elige pintura lavable o zócalos a media altura. Los adolescentes querrán decorar con murales de paisajes o fotos personales.
Ambiente rústico
Si en un dormitorio infantil siempre falta espacio para guardar juguetes, en uno compartido, el problema se multiplica por dos. Aprovecha el hueco bajo las camas para poner cajas, mejor con ruedas para que les resulte más fácil moverlas; coloca a los pies cestos o baúles; junto a las paredes, estanterías modulares con cajas con etiquetas para saber dónde va cada cosa, y percheros para colgar sus abrigos. Eso sí, todo a su altura para fomentar su autonomía.
Cuelga de un perchero cabezas de peluches, sombreros... para vestir y dar personalidad a la pared.
En un espacio donde los niños pasan tanto tiempo, es necesario reforzar la seguridad. Coloca bajo las alfombras, una base antideslizante, protectores en los enchufes, topes en las puertas, sujeta bien estanterías a la pared y compra juguetes que cumplan las normas de la Unión Europea.
Un dormitorio para dos, de cuento
Otra idea para decorar el dormitorio de tus hijos es seguir el estilo predominante de tu hogar. Si te gusta el estilo rural, viste la habitación con muebles de madera y textiles de cama de cuadros. Si el aire escandinavo, inunda tu casa, escoge piezas de líneas rectas en tonos blanco o gris. Si lo tuyo es el minimalismo, reduce el mobiliario a lo esencial y potencia la parte del orden. Y si cumples los deseos de tus hijos, tendrás un espacio ecléctico lleno de color y fantasía.
Haz tu librería con un par de baldas en la pared y coloca sus libros favoritos.
Adapta la luz a las diferentes actividades que se realizan en su dormitorio.
Aprovecha la luz natural y, para cuando falte, coloca un punto general para jugar
y uno puntual en la zona de estudio. Las bombillas deben estar protegidas para difuminar la luz y prevenir accidentes.
Con cajones extra
Cuando en la habitación conviven dos hermanos, es necesario elegir qué tipo de cama es la más cómoda y la que mejor se adapta al espacio. La litera es la que mejor optimiza el espacio, eso sí, asegúrate de dejar libre al menos 60 cm entre la cama y el techo. Las nido son más incómodas y ocupan más: tienes que tener disponible 120 cm libres, 80 para la cama nido y 40 de paso. Si el cuarto es alargado y estrecho, coloca dos camas con una mesilla en el centro.
Apliques de pared: Ganan espacio y permiten tener la mesilla despejada para las cosas de cada uno.
Opta por muebles que se adapten al rápido crecimiento de los niños. Elige camas extensibles, piezas convertibles que pasan de cambiador a cómoda y muebles atemporales y neutros que te permitan adaptarlos a cada edad cambiando únicamente textiles y vinilos.