Consejos para una colada perfecta

Separar las prendas, meter en bolsas lo más delicado, usar el programa adecuado… pequeños detalles que marcan la diferencia en que tu ropa salga perfecta de la lavadora o no. ¡Hacemos la colada perfecta!

Sigue estos consejos a la hora de preparar tu ropa para lavar y las prendas saldrán limpias y en perfecto estado, al tiempo que se mantendrán como nuevas durante más tiempo. Ciclos de lavado, tipos de tejidos, los símbolos en las etiquetas de lavado, el uso del detergente… Estos son nuestros consejos para hacer una colada perfecta y no morir en el intento.

Cubos para la colada, cada color en un cubo. De Brabantia

1. Divide y vencerás. Separa la ropa de color de la blanca. Incluso, a la hora de poner una lavadora, reserva una para colores muy intensos y otra para los medios. En general, guíate por estas separaciones para tu ropa: blanca / colores claros / colores fuertes o negro / tejidos delicados (prendas de deporte, por ejemplo). Puedes usar diferentes cubos, que te facilitará la tarea de separar las prendas. Nunca dejes la ropa sucia dentro de la lavadora, acumulará olores y humedad.

2. Sé precavid@. Las prendas llegan a la lavadora sin nada en los bolsillos. Las que se puedan enganchar o las que incorporen cremalleras o botones grandes, del revés. Y si hay manchas, conviene tratarlas antes. Revisa las prendas y aplica un producto específico antes de meterlas en la lavadora. Siempre es preferible quitar una mancha antes de que se seque y penetre demasiado en el tejido.

3. La lavadora tiene un límite. Nos referimos a la carga que admite el tambor. No pongas demasiada ropa, tiene que estar llena pero no atiborrada. Si hay mucha ropa pueden quedar restos de detergente al final del lavado. Truco: debe entrar una mano entre la ropa y la parte superior del tambor.

4. Utiliza la cantidad adecuada de detergente, según la carga, la cantidad de colada y la dureza del agua (diferente en cada lugar geográfico). En los paquetes, el fabricante da unas indicaciones muy útiles para seguirlas. Más detergente no es sinónimo de ropa más limpia.

5. Si los blancos han perdido luminosidad… utiliza un detergente con lejía o potenciadores del blanco. Es importante lavar la ropa blanca solo con blanco para que no pierda intensidad con los lavados al mezclar las prendas con otros colores (y tenderla al sol, que recupera la luz de los blancos). Para los tejidos con color, nunca utilices detergentes con lejía, apagará los tonos.

Lava la ropa blanca solo con prendas blancas. Tender la ropa blanca al aire libre y que reciba los rayos del sol alarga la luminosidad de los tonos. Un complementos perfecto a tu colada. Foto, de Affari

6. Las prendas más delicadas deben ir en bolsitas de tela, protegidas (una bolsa DIY que te hagas tú, una funda de almohada, una camiseta vieja…). Existen unas bolitas de plástico que actúan a modo de carcasa para meter las prendas de menos tamaño y que no se pierdan en el tambor. Según de qué tejidos se trate, incluso puedes usar un detergente específico para la colada más delicada, como los tejidos de lana o seda. También algunos tejidos deportivos.

Foto, de Curver

7. ¿Lavado de prendas plumíferas? Edredones, abrigos, cojines… Para que no se apelmacen las plumas, introduce en el tambor varias pelotas de tenis, que golpeen la prenda durante el lavado.

8. La lavadora lava tu colada. Pues eso, si es la encargada de dejarla reluciente, la máquina en sí debe estar en perfecto estado. Existen detergentes específicos para lavar tu lavadora y evitar la acumulación de cal, pero también puedes poner un programa a 60-90º, sin ropa y con un detergente con lejía. Así la lavarás "por dentro". Evita malos olores, secando la puerta tras un lavado y dejándola abierta para que se evapore la humedad.

9. Lee las instrucciones de las etiquetas de las prendas si te surgen dudas. En ellas se indica, entre otras cosas, la temperatura adecuada para esa prenda y el programa de lavado.

Otros aspecto que platea dudas: el cajón del detergente. Sus estar dividido en varios compartimentos, indicados con un 1 (I) o un 2 (II) y el dibujo de una flor. Cada uno es para un detergente y programa. En el 1 debes poner el detergente si utilizas un programa de prelavado. En el 2 va el detergente para el lavado principal y en el de la flor echa el suavizante.

A no ser que laves prendas muy sucias, es preferible que utilices programas cortos a carga completa para un ahorro energético. A baja temperatura se consume menos y además la ropa no se estropea tanto. Muchas marcas incorporan programas eco. ¡Úsalo!

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