Una increíble transformación: nueva distribución, revestimientos y muebles han convertido este espacio en una cocina típicamente cottage... ¡De película!
Proyectada hasta en el más mínimo detalle por el estudio de diseño Con Mucho Gusto, y Jessica Zueras al frente, esta cocina con comedor es un inmejorable ejemplo de metamorfosis. En la reforma no se ha tocado un solo tabique: ambos ambientes ocupaban la misma superficie que los actuales; sin embargo, y gracias a una planificación brillante, ahora parecen mucho más amplios y el estilo cottage con que se han decorado no puede ser más adecuado al entorno y al tipo de vivienda.
No se amplió el espacio ni un centímetro, pero ahora la cocina parece más grande. Comparte superficie común con el comedor, como ya lo hacía en origen. Una pequeña península con dos armarios fue el único elemento añadido respecto a la antigua distribución.
ANTES...
Desordenada, poco funcional... Esta cocina, con muebles blancos y revestimientos anticuados, parecía sacada de mitad de s. XX.
Zonas de almacenaje
Un buen detalle para aprovechar el espacio y dar un toque estético son estas baldas gruesas de madera, hechas a medida, y dispuestas de forma simétrica en cada lateral de la cocina. En ellas se ha colocado la vajilla y recipientes decorativos.
ANTES...
Al otro lado de la puerta de acceso al jardín se había instalado una zona para comer, un comedor de diario equipado con muebles laminados y mesa similares a los de la cocina. El ambiente no tenía entidad propia ni ofrecía gracia alguna.
Ahora es un comedor con mucho encanto
El papel pintado floral, de Cole & Son, decora la pared del comedor y lo llena de alegría, al igual que en la cocina. Es el nexo de unión entre los dos espacios. La mesa se ha colocado en el centro, un modelo en madera que encaja muy bien en esta deco cottage. Sillas y lámpara blancas completan el atrezo.
Estos han sido los aciertos del trabajo de renovación
Muebles en “U” y con península. Se respetó la distribución de la antigua cocina, pero en la pared del fondo se prescindió de armarios superiores. En su lugar, se instaló una composición a medida, de techo a suelo, en el lateral izquierdo, en el que también se encajaron el horno y el frigorífico. Dos armarios “cierran” la “U” con una península a la derecha, que separa los dos ambientes.
Armarios con puertas decoradas. Todos se hicieron a medida y se pintaron en laca verde. Las puertas llevan marcos y fresados verticales, que acentúan ese especial toque campero. El verde manzana es luminoso y combina de maravilla con los otros.
Y como acabados: el blanco, el madera y el acero de los electrodomésticos.
La elegante encimera Carrara, de la firma Compac, añade un contrapunto sofisticado al estilo cottage.
Revestimientos cálidos. El frontal de cocina se revistió con un zócalo alto de baldosas blancas, de Equipe Cerámicas, que, al ser irregulares, producen efecto rústico. La parte superior de esta pared se empapeló con el mismo modelo que decora el comedor.
Suelo de imitación. Se ha colocado idéntico pavimento en el doble ambiente, para dar continuidad y ampliar visualmente el espacio. Piezas cerámicas, de la firma Saloni, que imitan a la perfección el aspecto de la tarima de madera: así se consigue transmitir el confort de este material, pero se facilita la limpieza.
Reforma y fotos: Con Mucho Gusto (reformaszaragoza.es)