La pasión de Rosa Urbano por el mundo de la moda y las tendencias —algo que le viene desde pequeña— despertó su interés por el diseño y el interiorismo, profesión a la que se dedica desde hace casi veinte años. En 2015, Rosa fundó Urbano byU, su estudio de interiorismo, desde el que ha creado un estilo propio, moderno, elegante y funcional, que se refleja en todos sus proyectos, incluido, cómo no, el de su casa de Madrid. Un piso que tiene algo más de 100 m2, que ella misma diseñó y reformó por completo. “Diseñar casas me parece maravilloso. Crear ambientes únicos y personales para que los que viven en ellos se sientan diferentes”, nos cuenta Rosa. Su vivienda no iba a ser un caso aparte. Por eso, proyectó una reforma llena de personalidad. El primer paso fue idear una nueva distribución, pues la vivienda estaba muy compartimentada. “Siguiendo mi filosofía de vida, me propuse dejar solo lo estrictamente necesario”, explica la interiorista, quien creó espacios abiertos pero bien diferenciados.
Además, optó por el blanco en suelos y paredes, y mármol Macael en el cuarto de baño principal, para enfatizar la idea de encontrarnos en un ambiente continuo, donde la luz se dispersa. Este color es también perfecto para realzar la decoración. Y es que, como ella misma reconoce, le encantan los contrastes. Se nota que disfruta seleccionando muebles, texturas, telas… La predilección por los materiales nobles, así como el uso de tejidos naturales, son otras de las señas de identidad que quedan patentes en la decoración de su casa. En ese empeño por lograr ambientes singulares y con personalidad, muchos de los muebles que encontramos en casa de Rosa Urbano son diseños propios, como la mesa del comedor, el cabecero y las mesillas del dormitorio principal, el mueble de lavabo del cuarto de baño o los sillones de la zona de estar. Para estos últimos escogió una tapicería de algodón con estampado geométrico en tonos azul, blanco y negro; la paleta de color característica de la interiorista. “Son mis básicos y los combino con otras tonalidades que se dejan ver menos en mis proyectos”, nos cuenta.
Entre las piezas que pueblan la casa también encontramos muebles que han sido personalizados por la interiorista con nuevos acabados o tapicerías acordes con su estilo y con la decoración de su casa. Las obras de arte, como la fotografía del salón o el cuadro del dormitorio, juegan un papel decisivo a la hora de crear ambientes únicos. Y es que a Rosa le encanta lo que hace, ¡y se nota!