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Vender una casa no es una tarea sencilla, y es que el mercado es tan amplio y la decisión de comprar tan seria, que probablamente se convertirá en un proceso largo y tedioso, más aún cuando no cuentas con ''buena materia prima''. Y no, no nos referimos a que los palacetes se vendan más rápido, sino a que con ciertos trucos y pequeñas mejoras revalorizarás tu casa hasta niveles insospechados, como ocurrió con esta vivienda alicantina que alcanzó un 50% más.
Utilizando un presupuesto mínimo, la casa de tres dormitorios, terraza, salón comedor, cocina y baño, ganó frescura y estilo gracias a un nuevo suelo de tarima imitando a la madera, a las paredes de color blanco, y a una decoración tan moderna como funcional, con aires naturales. ¿El resultado? ¡Aquí lo tienes!
Fotos e información: Cortesía de Cdkasa
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A pesar de ser pequeñito, el balcón ha quedado monísimo y muy natural gracias a la mesa con sillas plegables.
Al pintar las paredes de color blanco, la casa ha ganado mucha luminosidad.
No se trata de llenar la vivienda de muebles al azar, sino de elegir piezas clave que resalten la belleza del ambiente.
El atrapasueños, los sombreros y el espejo dan vida a una pared desnuda, ¡y todo de una forma la mar de sencilla!
Las flores son imprescindibles para que una casa gane naturalidad y mucha armonía.
Un pequeño tabique conecta el comedor con el salón y el pasillo, generando una sensación de amplitud visual.
Con todo lo básico y necesario para cocinar en un espacio acogedor.
Gracias a los tonos blancos y a las mesillas de madera, el dormitorio ha quedado de lo más bonito, ¿no crees?
Los colores de los cojines combinan estupendamente con la gama cromática del dormitorio.
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