La rehabilitación de Ca Na Marta, situada en la localidad menorquina de Ciutadella, se centró en dar a los dormitorios un cuarto de baño propio, aunque también se aprovechó para hacer varias mejoras; una de ellas, la iluminación. De su nuevo interiorismo se encargó la decoradora Carmen Carretero Niembro y de las obras, el constructor Juan Miguel Llompart, de Jover Construcciones. De la casa, que es segunda residencia de Marc y Marta, un matrimonio con niños, cabe destacar que mantiene la esencia de la construcción, con sus paredes encaladas, la viguería de madera y el pavimento rústico.
Su estética, sin embargo, se aproxima a una casa actual donde el color blanco actúa como hilo conductor entre los diferentes ambientes, desde la planta baja, donde rodea al patio y su piscina y fluye hasta la cocina y el comedor, hasta llegar a las superiores, donde se sitúan el salón y los dormitorios. Todos los ambientes ganan interés visual con la presencia de los elementos arquitectónicos tradicionales, como los amplios arcos que muestran el generoso grosor de los muros, el bonito entramado de vigas en el techo o la textura y la variedad de matices de la piedra.
En armonía con esa arquitectura, una decoración natural, donde tienen cabida diferentes estilos. En el comedor, con muebles tradicionales, es una apuesta decidida por el estilo rústico; mientras que la cocina, a dos pasos de éste, se ha equipado con un mobiliario de diseño depurado; y en el salón, son las pinceladas azules las que evocan la proximidad del Mediterráneo. Para los tres dormitorios y sus baños, la pauta decorativa es similar. Cabeceros de obra, con repisas de madera de pino y hornacinas, y textiles alegres y vitales de inspiración country chic convierten las camas en punto focal.En los cuartos de baño, plenos de matices y texturas, la luz natural se propaga con la misma facilidad gracias a sus paredes blancas y a la sensación que transmiten, de paz y calma. Claves de estos espacios: la piedra de marés en los lavabos, el mobiliario de obra y madera de pino, y unos espejos singulares, realizados a partir de puertas y ventanas antiguas, restauradas.