- Un piso de estilo nórdico, industrial y mediterráneo
- Un piso de diseño moderno y fresco con estilo mediterráneo
- Un apartamento decorado con estilo mediterráneo en blanco y azul
El encargo de esta vivienda vino de una pareja internacional que buscaba crear en el corazón de Madrid el hogar perfecto donde formar su familia. Los objetivos estaban claros: el vehículo conductor del proyecto debía ser la luz, definiendo espacios continuos que fluyeran a través del interior y el exterior de la casa (este último, compuesto por un amplio patio que incluye un área de comedor al aire libre) a través de materiales naturales, inundando todas las estancias.
El estudio LID Arquitectura + Diseño, se centró en recrear un oasis de paz escondido en el núcleo urbano de la ciudad, dotándolo del espíritu mediterráneo de sus propietarios: una pareja joven y con un carácter muy relajado, acostumbrada a la arquitectura costera y en continuo contacto con la naturaleza.
Se apostó por la comodidad y la versatilidad en toda la vivienda, permitiendo que aflorase la esencia del edificio de mediados del siglo pasado mediante los elementos constructivos originales en muchos de sus espacios.
Ventilación cruzada en toda la vivienda
También se crearon circulaciones cruzadas a través de varios puntos de ventilación para garantizar la entrada de aire fresco en todas las estancias.
Interiorismo con espíritu artesanal
Para concebir ambientes únicos y auténticos con un toque artesanal, se utilizaron técnicas y materiales tradicionales, con elementos como los lavabos de los baños, diseñados y fabricados artesanalmente in situ para el proyecto.
Texturas cálidas y acogedoras visten el interiorismo, en el que se apostó por el uso de materiales naturales como los linos y el algodón para los textiles, y el microcemento y los acabados artesanos en revestimientos de pared.
Máximo confort en la habitación del bebé
La habitación del bebé se planteó con un diseño cálido que busca, a través de los materiales naturales, ofrecer una sensación de comodidad, huyendo de colores estridentes y apostando por materiales y colores luminosos en tonos tierra.
Uno de los principales desafíos del proyecto consistió en la creación de un espacio habitable bajo cubierta, teniendo en cuenta las limitaciones de altura para optimizar al máximo las posibilidades de la vivienda.
Como criterio de diseño, se optó por la recuperación de la estructura abovedada original de la cubierta, dejando vistas las viguetas estructurales y generando grandes aperturas de luz natural que inundan todo su interior para dotar a la habitación de un carácter específico diferente al del resto de la vivienda. El resultado es un dormitorio de estilo rústico y un baño que busca aprovechar al máximo el espacio disponible con detalles diseñados a medida para cada rincón.
Proyecto e información: Cortesía de LID Arquitectura + Diseño.