Vivir en una casa que se adapte a nuestros gustos y necesidades es fundamental para ser feliz y que nuestro día a día se vuelva más confortable. Sin embargo, este piso de tres dormitorios y dos baños en el barrio barcelonés de Poble Nou, necesitaba algún que otro cambio para cumplir con las expectativas de sus propietarios, una pareja con una niña y un niño. Marina Sezam y su equipo se encargaron del proyecto de interiorismo y la reforma parcial de la vivienda.
Una reforma con múltiples objetivos
Aunque él estaba contento en general con el piso, ella necesitaba actualizarlo para 'hacerlo más suyo', y ahora que los niños ya no eran tan pequeños, empezaba a ser un buen momento. Esta fue la base sobre la que se empezó a trabajar, aunque poco después se añadieron nuevas razones: el teletrabajo y los confinamientos, y potenciar la relación entre padres e hijos. De este modo, se decidió intervenir en el dormitorio con baño suite de los padres, para que fuera más bonito, agradable y funcional, y que ganara espacio de almacenamiento con un nuevo armario.
Se consiguió además que el aseo diario se produjera en un ambiente sereno y ordenado, dominado por los tonos neutros y la calidez de la madera.
Un baño más happy para los peques
Por otro lado, se encontró la forma de ganar otro armario más en el distribuidor sin que el baño de los niños perdiera ni un ápice de la funcionalidad que ya tenía. Un baño que se volvió más divertido, moderno y práctico para el día a día, gracias al papel pintado que exhibe un simpático mapamundi con dibujos de barcos.
El salón se amuebló con tonos muy neutros y un estilo de líneas rectas, minimalista y noble al mismo tiempo.
Nuestra distribución y apertura al salón
Aunque la cocina siempre había estado aislada en esta vivienda, el estudio optó por crear una abertura flexible, que pudiera cerrarse cuando se quisiera, pero que permitiera la comunicación con el salón y funcionara también como pasaplatos.
El recibidor y la distribución de la cocina se modificaron para transformarlos en espacios muy neutros, bonitos, funcionales y adaptados al estilo de vida familiar.
Proyecto e información: Cortesía de Marina Sezam.