Viajamos a Vancouver para conocer una de las casas de campo más bonitas del mundo. Se trata del hogar del jugador de hockey David Jones, su esposa Kimberly y sus tres hijos. La familia deseaba que su casa luciese un estilo tradicional y relajado, sin perder ni un ápice de sofisticación, así que optaron por una vivienda de arquitectura clásica americana, con revestimientos de madera en color blanco, un precioso jardín y un porche perfecto para disfrutar de las veladas al fresco.
Se distribuye en tres plantas conectadas a través de una escalera majestuosa con peldaños de madera.
La planta principal también alberga un amplio comedor, salón, oficina, lavandería y otra cocina de mayordomo. En la planta baja, se encuentran el spa, una pista de hockey interior, una sala de entretenimiento y dormitorios para los invitados.
En cuanto a la paleta de colores, la interiorista Kelly Deck Design utilizó una gama cálida y terrosa para evitar que la casa se sintiera demasiado fría. Además, los suelos de roble completan la calidez en todas las estancias.
La cocina goza de encanto provenzal, con isla central y tiradores de concha en acabado dorado envejecido.
La casa cuenta con seis dormitorios y cinco baños.
Kimberly fue la encargada de escoger todo el mobiliario y la decoración, apostando por piezas tapizadas, hallazgos vintage y mesas personalizadas diseñadas con anticuarios locales. También rescató muebles de herencia y obras de arte de la casa de sus padres. ¿Verdad que el resultado es encantador?
Proyecto e información: Cortesía de Kelly Deck Design. Selección del mobiliario y de la decoración: Kimberly Vaage Jones. Estilista: Debbie Frederickson.