En esta casa de vacaciones (o segunda residencia) de estilo californiano, la sensación de paz y armonía te invade nada más entrar por la puerta. Sus propietarios, una familia neoyorquina, eligieron a la interiorista Natalie Myers de Veneer Designs para reformar la vivienda, dándole total libertad creativa durante el proyecto. Para darle ese estilo californiano que resulta tan fresco e ideal en una casa vacacional, Natalie empleó una gama de tonos terrosos muy suaves sobre un fondo de color blanco. El juego entre los diversos materiales y texturas, junto con una estética boho chic de líneas contemporáneas, obraron el milagro.
En lo referente a la distribución, las zonas comunes se proyectaron en un plan abierto que favorece la entrada de luz natural desde el jardín, al que se accede mediante unas puertas correderas situadas en la cocina.
Otros detalles decorativos que marcaron la diferencia en el resultado final fueron los azulejos y los papeles pintados, y en general, las formas geométricas que dominan ingeniosamente cada rincón.
Proyecto e información: Cortesía de Natalie Myers, de Veneer Designs.