Si te gustan los edificios señoriales, el nuevo proyecto de Keren y Thomas Richter, del estudio de interiores White Arrow, te va a encantar. Situado en un edificio de 1903 en Berlín, este piso de dos dormitorios exhibe las clásicas molduras y medallones que se conservaron a la perfección tras un cuidado trabajo de renovación. En cuanto a los cambios de distribución, destaca la transformación de una antigua despensa en un baño, una idea que permitió ganar mayor funcionalidad. Y es que los arquitectos replantearon todo el diseño de la vivienda para ocultar la asimetría, creando espacios de almacenaje amplios y discretos. Los armarios acanalados blancos realizados a medida e inspirados en la decoración esconden los electrodomésticos de la cocina más antiestéticos, mientras las literas de Oliver Furniture maximizan el espacio en la habitación de los niños.
En cuanto a la gama cromática y material, se eligió una paleta de colores otoñales y diferentes texturas para decorar la casa, ahora equipada con diseños vintage italianos y franceses de mediados de siglo, como las lámparas de Carlo Nason y los textiles de Pierre Frey, que reflejan el espíritu europeo.
Proyecto e información: Cortesía de White Arrow.