Esta casa unifamiliar situada en la costa de Vigo, concretamente, en el Val Miñor, llevaba construida unos 10 años cuando los nuevos dueños quisieron adecentarla y adaptarla a sus necesidades. La propiedad, de aproximadamente 270 metros cuadrados, nunca había sido habitada, no tenía cocina y presentaba el deterioro lógico del paso del tiempo, además de las secuelas de una crecida de aguas que en su día inundó la planta del sótano.
El objetivo de la reforma consistió en poner a punto la vivienda y solventar todos los desperfectos provocados por la falta de uso de la misma durante tanto tiempo. La planta bajo cubierta se rehabilitó por completo, creando así dos dormitorios adicionales y un baño. También hubo que acondicionar la cocina y construir un pequeño aseo de cortesía en la planta baja.
La casa fue amueblada y decorada íntegramente por Espacio Concept.
Respecto a la decoración, se buscó un estilo muy fresco con pequeñas notas marineras y un predominio claro de los tonos azules en toda la casa, haciendo un guiño a la zona costera en la que se ubica la vivienda.
El salón-comedor es un espacio muy amplio. Destaca el pequeño rincón de trabajo compuesto por un escritorio de IKEA con estantería integrada, muy ligero y anclado a la pared sobre un papel pintado de cuadros Vichy.
El dormitorio principal es también una estancia de dimensiones generosas y su decoración se abordó de forma muy limpia: cama doble con banco piecero en roble; mesillas suspendidas y cabecero tapizado en azul, de La Redoute; y papel pintado con una trama étnica muy sutil, sobre la que se instalaron los apliques de lectura, de Aromas del Campo.
En el dormitorio infantil, muy fiel a la metodología Montessori con camas a ras del suelo, percheros y estantes accesibles para los más pequeños de la casa, la pared se decoró con un papel azul turquesa plagado de pececitos, concibiendo un efecto pecera muy bonito en las camas.
El baño de la planta bajo cubierta sigue la misma filosofía. Alicatado con azulejos tipo metro hasta media altura (excepto en la ducha), se decoró con un papel pintado de peces en tonos azules que combina con el mueble de lavabo de Leroy Merlin, y contrasta con la baldosa cerámica imitación madera del suelo.
La iluminación se soluciona con una tira led en el techo y dos apliques de Aromas del Campo sobre el espejo.
En los dormitorios abuhardillados, el reto consistió en crear un módulo de almacenaje auxiliar en la zona con mayor caída de cubierta (mediante grandes cajones deslizantes), que al mismo tiempo incluyera un estante en roble para funcionar como repisa/mesilla de noche.
En el exterior, la casa dispone de un gran porche que se decoró con mobiliario de IKEA y Westwing, y textiles de Kave Home. La combinación de fibras y tonos azules otorga muchísima frescura a este área al aire libre.
Proyecto e información: Cortesía de Espacio Concept.