No sabemos si comerán perdices, pero lo que sí tenemos claro es que esta joven pareja vive feliz en compañía de su recién nacido. En parte, gracias a la reforma de su apartamento de 80 metros cuadrados en un tranquilo barrio de Tel Aviv.
El proyecto a cargo de la interiorista Yael Perry, transformó esta vivienda de los años 70 en un espacio moderno y adaptado a las necesidades de sus propietarios.
Para concebir el hogar perfecto, Yael decidió combinar muebles contemporáneos y escandinavos que otorgaran a las estancias esos aires modernos tan deseados por la familia. Ahora la distribución cuenta con cocina abierta, salón, comedor y una pequeña terraza, dos dormitorios, un baño principal, y un despacho que también se utiliza como habitación de invitados.
La entrada conduce a las áreas comunes: cocina, salón, comedor y una pequeña terraza de planta abierta revestida con un parquet brillante de estilo scandi.
La isla central dispone de una encimera de terrazo de Agglotech, otorgando un estilo elegante y contemporáneo al apartamento.
Para conectar la cocina y el salón se creó una abertura en la pared tras los armarios de la cocina.
La mesa de comedor se hizo a medida combinada con las sillas de IKEA en tonos corcho y empolvados.
Junto al salón, había una pequeña terraza que se encontraba cerrada y que ahora ha ganado vida gracias a las baldosas con diseño geométrico en 3D y a las plantas que aportan su dosis de frescor.
El suelo y la pared del baño principal se revistieron con baldosas de terrazo italiano que contrastan con las paredes blancas y la grifería en color negro.
Bajo el lavamanos de Corian blanco, se diseñó un armario rosa empolvado a medida. Y entre esta zona y el sanitario, donde se situaba el antiguo sistema de calefacción, se creó un espacio oculto que alberga un toallero.
El dormitorio del recién nacido se decoró siguiendo un estilo minimalista que gana un toque de gracia mediante los coloridos juguetes y accesorios.
En el centro de la habitación se colocó una alfombra redonda y una lámpara de origami con ilustraciones del circo que iluminan la estancia con una luz cálida.
Proyecto e información: Cortesía de Yael Perry.