Si pensamos en el gran sueño americano, se nos dibuja automáticamente en la mente una de aquellas casas de película ochentera en la que precisamente la escasez de metros no era un problema. Dos plantas, grandes escalinatas, salones en los que perderse, dormitorios infinitos con baño y vestidor incluidos... Sí, sin duda esa sería una buena definición.
Hoy, sin embargo, ese concepto tradicional de vivienda familiar va perdiendo cada vez más adeptos frente a los abogan por un estilo de vida mucho más sencillo, más minimalista. Y es que prescindir de todo lo innecesario hay quien dice que nos convierte en personas mucho más felices y plenas. Es en este contexto en el que nace el estudio Timbercraft Tiny Homes, en Estados Unidos, encargado de llevar a cabo este proyecto: Una coqueta casa de campo que poder llevarte a cualquier parte sin prescindir de ningún detalle. Cocina, salón, dormitorio, baño, desván y ¡hasta porche! ¿Te apetece descubrirla?