Una buhardilla moderna y con encanto

Las dos alturas con las que cuenta la construcción se comunican por una escalera que dota de encanto cada nivel. Los aproximadamente 17 m2 de la planta baja se distribuyen en salón, cocina, comedor y baño. En la planta alta, los 10 m2 están reservados al dormitorio. Mobiliario, de Maisons du Monde. Sofá cama de venta en Ikea.
Isabel ha contado en todo momento con el asesoramiento de la empresa de gestión de obras ELITTIA.

La decoración de la sala de estar es un fiel reflejo del estilo que predomina en toda la vivienda. Una de las premisas a la hora de escoger el mobiliario fue que las piezas tuvieran suficiente capacidad de almacenaje, para rentabilizar cada rincón. La mezcla de acabados también es una de las señas de identidad de este proyecto. En el salón, un aparador de metal oscuro con remaches es la pieza estrella.

Para lograr una mayor sensación de amplitud, la cocina no se delimitó con tabiques. De esta forma el salón, la cocina y el comedor ocupan un mismo espacio. Es precisamente una mesa de madera la que marca las dimensiones de cada ambiente. En la cocina predomina el estilo retro en el mobiliario, de madera maciza de abedul oscuro combinado con madera en un tono natural en las encimeras.

Junto a la pared se encuentra una escalera de diseño ligero, con peldaños volados, por la que se accede al dormitorio. El acierto: enmarcarla con una fotografía que proporciona profundidad al salón. El metal y la madera maciza, presentes en cada ambiente, son los materiales de referencia en la escalera y también en las vigas del techo, totalmente renovadas.

Frente a la escalera, una escalinata fija en la pared conduce a un altillo que se utiliza como trastero. ¡Qué desahogo!

El dormitorio tiene el techo abuhardillado con vigas pintadas en color blanco. El colchón se ha colocado sobre una estructura de metal con ruedas, que levanta pocos centímetros del suelo, diseñada por Elittia.