Miriam Yeleq
La mayoría de los baños son interiores, por lo que una correcta iluminación es fundamental a la hora de plantear su reforma. Elegir los azulejos y el mueble de baño en un tono blanco satinado resultó todo un acierto ya que reflejan bien la luz artificial. Las puertas correderas empotradas en el muro son perfectas en baños pequeños. Al abrirlas, el espacio se multiplica.
Realización: Reyes Pérez
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Los detalles añaden personalidad: unos percheros dorados, un perfumero chic y unas cajitas en el tocador…
Accesorios, de Zara Home.
Un diseño volado, en blanco, hecho a medida y con gran capacidad de almacenamiento, ocupa todo un frente. Sobre él, dos lavabos exentos con zona de tocador. Un espejo XL amplía visualmente el espacio.
Con pavimentos diferentes
A continuación de la zona de lavabos se instaló la ducha alicatada en negro, lo que le da profundidad visual y evita empastar con el blanco de los azulejos y el mueble de baño. Ambos espacios quedan perfectamente delimitados por el suelo, laminado en el primero y porcelánico con acabado de cemento, en el segundo. Plato de ducha y grifería, de Roca.
Mediante la instalación de una puerta corredera es posible el uso del baño por dos personas simultáneamente: mientras una se lava las manos o se maquilla, la otra puede ducharse con absoluta privacidad.
En el piso original, el dormitorio se comunicaba con un pasillo que llevaba al pequeño baño. Al eliminar el distribuidor, el baño ha ganado metros y presume ahora de un amplio y coqueto tocador. Percheros, de Zara Home. Toallas, de venta en Ikea.
Con dos lavamanos y ducha
El equipo de Hermanas Bolena (www.hermanasbolena.com) eliminó el pasillo original que salía del dormitorio para dárselo al cuarto de baño, que ahora cuenta con un amplio tocador.
1. DUCHA. Se instaló al fondo del cuarto de baño con el plato en blanco y paredes revestidas en porcelánico negro, a juego con la baldosa del suelo, que imita motivos hidraúlicos. También se renovó la grifería.
2. INODORO. A continuación de la ducha se dispuso el inodoro. Esta zona queda separada o integrada, según se quiera, gracias a una puerta corredera que amplía el espacio cuando queda abierta.
3. ZONA DE LAVABO. Se reservó toda una pared para colocar el mueble de baño que al no llegar al suelo aligera el espacio. Su generosa superficie hizo posible la colocación de dos lavabos que permiten su uso en pareja. Una puerta abatible comunica con el dormitorio mientras que por otra corredera se accede al salón.
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